Butaca de Gallinero: Escenas eliminadas
![]() |
|
Me pregunto cómo tiene que sentar a los profesionales del cine que todo el esfuerzo invertido en un trabajo, todas las lágrimas, el sudor y la sangre vertida, importen un mojón porque ese trabajo nunca aparecerá en pantalla. Es cierto, existen las ediciones en DVD con escenas eliminadas, pero ya me contarán qué DVDs había en el 63 cuando se estrenó la versión mutilada de la Cleopatra de Mankiewicz. Cuando hablo de frustración no pienso tanto en actores como Kevin Costner al que solo se le terminaron viendo los zapatos en Reencuentro, o de la desaparición de Mickey Rourke, Bill Pullman y Lukas Haas del metraje final de La Delgada Línea Roja. Pienso más bien en los curritos técnicos. En los hombres y mujeres que se dejaron las pestañas poniéndole a Bob Hoskins una cabeza de cerdo animada en ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, que nunca aparecería en la gran pantalla. O los responsables de la creación de un Washington futurista y un maquillaje sexagenario para Linda Halmilton en el final feliz desechado de Terminator II. Por otra parte, los perpetradores del pulpo gigante que nunca veríamos en Los Goonies me dan menos lástima. Esas personas no obtendrían reconocimiento por su trabajo. Aunque, si cobraron igual, al reconocimiento le pueden ir dando viento fresco, que no está la cosa para quejarse. Roberto Aguirre © humorenlared.com |
Pincha aquí para ir a otras columnas de Roberto Aguirre
Pincha aquí para ir a las columnas de los colaboradores más buscados