agosto 22, 2013

Flims: Guerra Mundial Z

cabecera_EK155_flims copia
r155_flimsMe considero fan del libro. Reconozco que estoy hasta el copetín de películas de zombies, pero el realismo sucio y naturalista de la obra de Max Brooks me hacía albergar alguna esperanza cuando me enteré de que Hollywood había comprado los derechos. Mentira cochina. Me lo olí a la legua. Sabía que, independientemente de facturas técnicas, interpretaciones y tratamientos verosímiles, Guerra Mundial Z sería otra película más de infectados, menús del día a base de cerebros e intestinos, carreras, tiros y huidas en el último segundo. No me equivocaba. Qué obra tan magna hubiera sido si los derechos los hubiera comprado la HBO, por ejemplo, y se hubiera rodado una serie en forma de falso documental. Con entrevistas, declaraciones e imágenes de archivo. Pero no. Había que ir a lo fácil.

Aquí huele a muerto
Que uno de los guionistas sea el insigne Straczynski no hace que la cosa sea menos decepcionante. Al final la película es un compendio de escenas que mezclan el thriller con el terror gore y la acción por un tubo. Una colección de cliffhungers en los que Brad Pitt se libra de ser devorado por los zombies por el canto de un duro. Una especie de Tintín y los Muertos Vivientes, con viajes por todo el globo. Y con final abierto, por supuesto, que hoy en día si no hay trilogía en el horizonte los ejecutivos ni se levantan de la cama.

LO MEJOR
Cuando los zombies rebasan el muro de Jerusalén formando una torre digna del Concurs de Castells de Tarragona.

LO PEOR
Que haga falta meter esposa e hijos en una película de zombies para dar profundidad humana al protagonista.

Horacio Sandoval © humorenlared.com

 

¿Te has quedado con las ganas? Tienes más de 3.300 puntos de distribución de EL KARMA

Y si quieres la revista en tu casa todos los meses suscríbete

Pincha aquí para ir al sumario de EL KARMA nº 155