Mens Insana: Hor konpon
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| Víctima de acoso, una mujer acude a comisaría para denunciar. El funcionario (uniformado) de turno resuelve rápidamente que el caso no merece atención. Eso a pesar de la campaña del Gobierno para animar encarecidamente a las víctimas de violencia de género a denunciar a sus agresores. La mujer, bastante confundida, observa y escucha a su interlocutor. El agente parece cansado y molesto. Le aconseja que intente primero resolver ella el problema y si no, ya si eso, que vuelva. Ah sí. Y que si está en la calle y se siente desprotegida, o así, que llame al 112 y aparecerá una patrulla “en nada”. Siempre y cuando se llegue a tiempo a efectuar esa llamada (digo yo). O siempre y cuando “en nada” no suceda lo irreparable.
Después de semejante despliegue de empatía y asistencia, esta mujer abandonó la comisaría confusa, enfadada y avergonzada. No entendía por qué había recibido ese trato. En España el año 2014 está siendo el segundo peor desde 2004 en cuanto a víctimas mortales de violencia de género. La instrucción para ella, que conozco y merece toda mi credibilidad, fue clara. Tomen nota las demás: Las chicas grandes deben intentar resolver por sí mismas sus “pequeños problemillas”. Y ya si no lo consiguen, o así, que vuelvan donde la policía. Hor konpon eta zorte on. |
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