julio 5, 2016

Butaca de Gallinero: Solidaridad

columna_raguirre_cabecera_gr

Me siento conmovido. Como removido por dentro. A menudo pensamos que los actores de Hollywood son seres que viven ajenos a la realidad. Que el polvo de la rutina y la vulgaridad de la vida cotidiana no les mancha ni les afecta. Que permanecen impolutos, inmaculados, distantes del devenir del mundo. Ignorantes, indolentes, despreocupados ante las problemáticas insondables que aquejan al común de los mortales. Que son islas frente a las desgracias que afligen a los más desfavorecidos. Nada más lejos de la realidad.

Julia Roberts ha dado un ejemplo al mundo durante la última edición del Festival de Cannes. Ha caminado descalza por la alfombra roja, emulando grandes gestas como las huelgas de hambre de Gandhi, el liderazgo del Movimiento por los Derechos Civiles de Martin Luther King o la insumisión de Mohamed Alí (D.E.P.) ante su inminente alistamiento durante la Guerra de Vietnam. Cual Erin Brokockovich, protestaba contra el rígido dresscode que obliga a las actrices a llevar zapatos de tacón en eventos de postín. La situación de los refugiados sirios, el calentamiento global o la financiación del terrorismo internacional nos distraen de lo que realmente importa. Qué suerte que tenemos a Julia, la nueva Rosa Parks.

Roberto Aguirre © humorenlared.com

 

Pincha aquí para ir a otras columnas de Roberto Aguirre

Pincha aquí para ir a las columnas de los colaboradores más buscados