¿Alguien ha oído hablar de crisis últimamente? La palabra empieza a estar gastada, agotada, se usa poco y ya suena más a agua pasada que a otra cosa. Será que ha mejorado un poco la situación, o que nos hemos acostumbrado a vivir con menos, o las dos cosas. ¡Coño, pues si es así que se note! Que circulen nuestros cuatro pavos. Compremos discos que nos gustan y vendamos los que ya no queremos, demos conciertos aunque a veces venga poca gente, vayamos a ver actuaciones de vez en cuando, sobemos los instrumentos y a los equipos de música, apuntémonos a clases. Aireemos, en definitiva, nuestro escueto patrimonio condenado a moverse en B casi por narices, aunque uno no quiera.
Y si llegamos un poco escorados a fin de mes, que le den morcilla, que para pagar facturas nos tienen que dar un margen también. Si no que nos lo pregunten a los músicos que tenemos bolos aún sin cobrar desde hace eones. O todos o ninguno, oigan. Ya, ya, cada cual sabe lo que tiene delante y cómo lo lleva, así que las arengas y los consejitos me los puedo meter por el ojal. Pero bueno, por esta vez y sin que sirva de precedente no me sale de los eggs. ¡Arriba, monederos de la tierra comprados en el chino con menos de 20 euros dentro! También tenéis vuestra función.

Juan Abarca © humorenlared.com