“… Pero Sánchez ha resultado no ser un dirigente cabal, sino un insensato sin escrúpulos que no duda en destruir el partido que con tanto desacierto ha dirigido antes que reconocer su enorme fracaso…”

Así se las gastaba el diario El País del grupo Prisa en su Editorial del 29 de septiembre de 2016. Tres días después, Pedro Sánchez había dejado de ser secretario general del Partido Socialista Obrero Español.

Nunca se había visto con tanta obscenidad cómo cuando una persona estorba al poder real, se disparan sobre ella todas las baterías. No hace falta ser muy inteligente para saber que un Editorial de estas características se escribe al dictado de los propietarios de una empresa cuyos intereses van más allá de la literatura y del propio periodismo. Tanta brutalidad contra alguien que no hace ni un año era tratado entre algodones por ese mismo medio sólo tiene dos explicaciones. Una, que hace un año pensaban que las alabanzas a Sánchez se las cobrarían en docilidad. Y dos, como eso no fue posible, se lo quitan de encima de un plumazo. Y nunca mejor dicho.

Para que luego digan que el papel ha muerto.

Julio Albitre Polo, director de EL KARMA.