mayo 4, 2020

El Final Perdido: 2001

A Stanley Kubrick le había encantado El Centinela de Arthur C. Clark pero a él le apetecía rodar lo que le saliera de las gónadas. Por ello comenzó a pergeñar para 2001 una historia que mantuviera el espíritu del relato literario original pero que acabara saliéndose de madre. Kubrick era así de cachondo. Para empezar, aquello de que a los homínidos del comienzo de la película se les apareciera un monolito y a partir de ese momento evolucionaran le parecía una chorrada. Su propuesta era que la epifanía evolutiva tuviera lugar por la aparición de un mueble bar de estilo Luis XV y que los monos, finos de cazalla, la emprendieran a garrotazos entre si.
Para la tercera parte del film tenía pensado un plot ingenioso y lleno de intriga. La nave Discovery recibiría la orden de acercarse a Júpiter para investigar una señal de socorro.
Orbitando cerca del planeta se encontrarían un monolito gigante (esta vez lo del mueble bar no iba a colar) lleno de huevos de una especie alienígena. (Más…)

julio 20, 2010

El Final Perdido: 2001

A Stanley Kubrick le había encantado El Centinela de Arthur C. Clark pero a él le apetecía rodar lo que le saliera de las gónadas. Por ello comenzó a pergeñar para 2001 una historia que mantuviera el espíritu del relato literario original pero que acabara saliéndose de madre. Kubrick era así de cachondo. Para empezar, aquello de que a los homínidos del comienzo de la película se les apareciera un monolito y a partir de ese momento evolucionaran le parecía una chorrada. Su propuesta era que la epifanía evolutiva tuviera lugar por la aparición de un mueble bar de estilo Luis XV y que los monos, finos de cazalla, la emprendieran a garrotazos entre si.
Para la tercera parte del film tenía pensado un plot ingenioso y lleno de intriga. La nave Discovery recibiría la orden de acercarse a Jupiter para investigar una señal de socorro. (Más…)