Desde el comienzo de los tiempos, el ser humano ha intentado encontrar apaños para elaborar sus ñapas de manera más rápida, de forma que tuviera más tiempo para comer el bocadillo de media mañana.
Desde que se desarrollaran los primitivos morteros de cal en el Neolítico, hasta la aplicación de la argamasa y el cemento ya en época de los romanos, el desarrollo tecnológico ha avanzado para encontrar sistemas más chapuceros y temporales de fijación de materiales, sí, pero más apañados. Los primeros intentos de desarrollar una cinta adhesiva de fácil aplicación, se remonta a los asentamientos de Çatalhöyük. (Más…) |