El lobby formado por influencers de la alimentación sana, grupos ecologistas de acción directa, colectivos de alérgicos alimentarios y asociaciones contra la explotación laboral en latifundios agrícolas de monocultivo ha logrado presionar a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y al Vaticano para cambiar la nomenclatura de los Cuatro Jinetes del Apocalíspis. A partir de ahora, Peste, Guerra, Hambre y Muerte, los cabalgadores de los corceles que aparecen en el Libro de las Revelaciones de San Juan, pasarán a llamarse Leche, Cacao, Avellanas y Azúcar. En palabras de los portavoces del grupo de presión, la medida pretende concienciar a la sociedad de los auténticos peligros que la atenazan, sin que Idilla Foods se haya pronunciado de momento al respecto.

A alguien habrán untado

El comité lobbista ha argumentado que probablemente haya habido más sufrimiento a lo largo de la historia por culpa de la intolerancia a la lactosa o las grasas saturadas de la Leche que por la Peste bubónica, por lo que se justifica el rebranding. Del mismo modo, ante los conflictos armados en Costa de Marfil, Ghana, Nigeria o Liberia por el control del cultivo del Cacao, el grupo de presión considera que Guerra es un término “demasiado genérico para referirse a lo de reventar gente a morterazos por el control de los recursos y tocaba empezar a mojarse”.

La división de alérgicos a los frutos secos esgrime como argumento que el Hambre “es jodida”, pero que se te bloqueen las vías respiratorias por intentar quitarse la gusa con unas Avellanas es mucho peor. Por útltimo, el grupo de asesores nutricionistas especializados en Diabetes tipo 2, caries y arterioesclerosis han dicho que Azúcar “le mea a Muerte en su puta cara”.

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