La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha informado a través del BOE de que a partir de ahora los muros de las cárceles españolas serán muros de Facebook. Fuentes cercanas al Ministerio del Interior han confirmado que las obras de demolición de las tapias de hormigón armado, acero y ladrillo que hasta ahora delimitaban el perímetro de las prisiones se iniciarán en breve. Responsables de la Subdirección General de Planificación y Gestión Económica han comunicado que están a la espera de que Meta se comprometa con una fecha para comenzar con el envío y posterior instalación de muros de Facebook prefabricados. El motivo que ha dado el ministerio para el cambio estructural de los presidios es que a los muros de Facebook “ya no se acerca ni dios” y su colocación genera un efecto disuasorio entre la población reclusa mucho más efectiva que el alambre de espino, las torres de vigilancia y los guardias con fúsiles de largo alcance.

Pocos likes

Informes recientes encargados por el SGIP revelan que los reclusos condenados en España tienen una media de edad de 41,7 años, que desciende hasta los 37,3 para los preventivos en espera de juicio, por lo que entran dentro del rango de usuarios de redes sociales demasiado jóvenes para usar Facebook. “Los nuevos muros ejercerán de revulsivo antifugas. Ningún presidiario nacido después de 1984 quiere ver un muro de Facebook ni en pintura. Su diseño obsoleto y sus funcionalidades poco dinámicas bastarán para mantener a los internos alejados”, explica Ángel Luis Ortiz González.

En otro orden de cosas, las paredes de las celdas de aislamiento para presos con comportamientos antidisciplinarios estarán decoradas con motivos de perfiles de MySpace, lo que ya ha generado denuncias de Amnistía Internacional.

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