Grandes Mentiras: 23 – La infancia es la época más feliz
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 A pesar de lo que dicen los demagogos y los apóstoles de la nostalgia retroactiva, la infancia no es un tiempo de dicha infinita. Venden la niñez como una época libre de responsabilidades en la que todo es regocijo y descubrimiento, pero se trata de una falacia promovida por los especuladores que tratan de revalorizar sus viejos vinilos de Parchís..Nº 1. Coeficiente Ni la ignorancia es la felicidad ni es justo que para insultar a un adulto con tendencia hacia la idiocia y la ausencia total de sentido común se le acuse de comportarse como un niño. Hay muchos ejemplos de niños con gran capacidad para la gestión, como Harry Potter, Tyrion Lannister, el pequeño Nicolás o el Paquirrín de Tierra 2. Nº 2. Contenidos Durante la infancia no sólo se nos restringe el acceso al material adulto más interesante, como el porno alemán o la edición on line del Boletín Oficial del Estado, sino que se utiliza a los niños para alejar al resto de la humanidad de otros contenidos. Grandes fracasos en taquilla se deben a haber calificado a una película como apta para todos los públicos. Nº 3. Indefensión Por si no fuera suficiente desgracia sufrir el bullying en el colegio, el sistema no provee a la infancia de las herramientas necesarias para defenderse. A un niño o una niña de 9 años, en 3º de Primaria, le supone un infierno burocrático adquirir una escopeta de caza para responder a los abusones de su clase. Hasta en EE.UU. les ponen trabas a los menores de 7 para poseer un arma corta. Nº 4. Votar Los niños no pueden acudir a las urnas, por lo que se les priva del derecho constitucional de insertar en la urna papeletas con penes dibujados. Incluso en el poco probable caso de que no quisieran introducir un voto nulo, se le estaría negando al infante el derecho a participar en el juego democrático. Con lo que a los niños les ha gustado siempre el circo. Nº 5. Extinción La baja natalidad en los países occidentales aboca a los niños hacia la extinción y eso les genera estrés. Se habla mucho de la ballena azul y del lince ibérico, pero Greenpeace nunca se ha pronunciado en favor de la preservación del prepúber. La única esperanza de seguir disfrutando de su presencia en el planeta es la existencia de reservas naturales, también conocidas como clases burbuja. © elkarma.eus |
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