Miguel Bosé ha confesado haberse puesto la vacuna contra la COVID-19 en secreto y sin que “ningunos hombres de negro hayan irrumpido en mi domicilio ni me hayan inmovilizado mientras me la inoculaban”. El cantante y actor, profundamente arrepentido por sus declaraciones de hace unos meses, asegura ahora que siente un amor incondicional por Bill Gates y que “la wifi me tira de puta madre”.

Del bicho al hecho

“No sé cómo explicarlo, pero soy una persona nueva. Creo que ponerme la vacuna ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida. Veo el mundo con otros ojos. Disfruto con cosas sencillas como aceptar las cookies, activar el uso compartido de archivos en Windows 10 o hacer click en absolutamente todos los anuncios que aparecen en mi muro de Facebook”, afirma Bosé con la mirada perdida en el vacío mientras un zumbido metalizado se oye a través de su sien derecha. El intérprete de Sevilla, Don Diablo o Amante bandido ha aprovechado para pedir “a toda esa gente que se plantea abandonar WhatsApp para migrar a Telegram” que no se deje influenciar por habladurías, falacias y fake news, que piensen por ellos mismos y que consientan siempre con la configuración de privacidad que viene por defecto en todas las aplicaciones.

El artista volverá a activar todas sus redes sociales y prefiere comunicarse a través de ellas en vez de conceder entrevistas en vivo “porque el nanobot elige siempre el momento más inoportuno para actualizarse, me ralentizo y no quiero abusar del tiempo de los periodistas”, comenta entre risas y observando el infinito.

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