Tras calificar de “abominación repugnante” la ley fiscal del presidente Trump, Elon Musk ha anunciado que abandona los Estados Unidos y se va a España. Quiere empezar desde “cero coma bastante” abriendo una gestoría para autónomos. El propietario de la antigua Twitter, Tesla y Space X ha salido escaldado de su experiencia al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental. Ha compartido con sus colaboradores que su decepción con la política es total. Según Musk, Donald Trump es un filosocialista, proteccionista, cobarde gallina, capitán de las sardinas y en la Tierra no hay futuro para la humanidad. Urge acelerar la colonización de Marte y enviar allí a los mejores. Su inteligencia artificial Grok le ha comentado que los autónomos españoles “no están mal”.

Por triplicado

Hay aproximadamente 3.394.261 autónomos en España. Con variadas ocupaciones en esa actividad alienante conocida como trabajo, mantienen por cuenta propia una salud física de hierro y un equilibrio mental único. “Salvo en abril, julio, octubre y enero”, matiza la veterinaria Viviana Bolizante. Musk pretende captar buena parte para su gestoría. Se llamará eXento y se ubicará en la comarca de Riotinto, Huelva, por ser este el paraje más parecido a Marte en España excluyendo algunos platós televisivos. “Elon quiere hablar con todos y cada uno personalmente pero, por si no da abasto, estamos adiestrando a Grok para que presente las trimestrales del IVA y también esa mierda de las mutuas”, confirma el ingeniero informático Pool Tax.

De entre todos sus clientes Elon Musk seleccionará los más avezados. Seres capaces de arreglar una nave espacial en vuelo o de presentar presupuestos por triplicado a una civilización extraterrestre listos para ser enviados al Planeta Rojo y que se busquen la vida. “No van a notar mucha diferencia”, suspira Musk mientras acaricia en la cabeza a su hijo X AE A-XII.

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