Un grupo de expertos ha revelado en su informe para la ONU que el planeta se está enfrentando a un Apocalipsis “mediocre y de muy escasa calidad”. El comité de sabios responsable de publicar el estudio cree que pasar de un corte de suministros de papel higiénico en 2020 al actual de aceite de girasol denota un advenimiento del fin del mundo tal como lo conocemos de “pésimo gusto y escasa ambición”.

Cada uno hasta donde puede

La mediocridad con la que el mundo parece afrontar su final preocupa a historiadores, antropólogos, economistas y científicos, que echan la culpa a una sociedad carente de valores y “excesivamente conformista” a la hora de enfrentarse al colapso global. “Que los primeros signos del Apocalipsis fueran que no quedaba papel de limpiarse el culo y que ahora se haya disparado el precio del aceite malo de freír las croquetas debería alarmarnos. De seguir así, ¿qué será lo siguiente con lo que la población entre en pánico? ¿Que ya no quedan patatas ruffles de jamón y queso y sólo podemos celebrar cumpleaños con bocabits? Si ni siquiera está lloviendo sangre, sino calima del desierto. Vaya puta mierda…”, informa cabizbaja Marta Bardillo, responsable de pasar a limpio el informe con letra Arial a doble espacio.

El colectivo de expertos tiene puestas sus esperanzas de mejora en la suspensión del suministro de gas y el incremento inasumible del coste de la luz y el combustible. “Pero es que encima lo que está subiendo más es el diesel. ¿Ven? Lo que les decimos, un Apocalipsis cutre… Que vergüenza vamos a pasar cuando se lo contemos a nuestros nietos junto a la hoguera mientras nos guarecemos en una gruta de la radiación nuclear”, concluye Bardillo.

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