La bombilla incandescente, el segundo invento más popular de siglo XIX después de los pirulos con barquillo, es en realidad un invento muy antiguo. Más antiguo que Edison o que Heinrich Goebel, incluso. Existen pinturas rupestres en Somalia en las que aparecen dibujados empleados de compañías eléctricas primitivas apuntando las lecturas de rústicos contadores junto a bombillas encendidas. Aunque algunos paleontólogos dudan sobre la autenticidad de estas pinturas (principalmente porque en ellas también aparece un televisor de plasma y uno de los hombres dibujados parece llevar una camiseta de AC-DC), el hallazgo podría suponer la primera referencia histórica a una bombilla y a una violación del código de vestir de un empleado al mismo tiempo. (Más…)