mayo 27, 2010

De Marca Mayor: Como Heidi

Me ha mirado un tuerto. O mejor dicho, un cojo. Si mis delicados pies han sido incapaces de sobrevivir al peep-toe lo que se avecina no les augura un futuro mucho mejor. Horror, los zuecos no se avecinan sino que ya están aquí. Han vuelto con la misma intensidad que un espantoso recuerdo de la infancia.
Se veía venir cuando las crocks horteras pasaron de ser calzado para sembrar en la huerta a estar bien vistos a la hora del aperitivo. La semilla del demonio estaba germinando y acaba de florecer en forma de todo tipo de zuecos, de madera, de goma, de cuero, con lentejuelas, con remaches… y prácticamente todos con tremendo taconazo.

Es evidente lo complicado que resulta caminar subida en esos andamios, con el pie bailando dentro a cada paso, con los dedos adoptando forma de ventosa para que el zueco no salga chutado, pero además es que son feos con cojones, antiestéticos y podológicamente perniciosos.
A pesar de todo esto, las celebrities ya se han subido al carro (o mejor dicho a los zancos) por ejemplo las gemelas Olsen, a las que les ha faltado tiempo para completar su colección de complementos horripilantes con esta nueva y fascinante tendencia.

Lorea Martín © humorenlared.com

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