septiembre 21, 2010

Juego de Niños: Mamíferas valientes

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Conozco a varias madres que después de dar a luz han cambiado su punto de vista sobre la lactancia natural. De repente se daban cuenta de que tenían escasa información, que era difícil seguir dando teta sin apoyo, que en la menor dificultad eran encaminadas hacia el biberón. Algunas buscaron ayuda, hablaron con otras madres, se informaron y amamantaron a sus bebés durante muchos meses. Las que trabajaban fuera de casa tuvieron que hacer un esfuerzo añadido. Hay quien se reorganiza, pide una excedencia, reduce jornada, se traslada o cambia de trabajo. También están las que ¡horror! deciden dejarlo.
Esas son “las mamíferas” que Edurne Uriarte menoscaba en su artículo del suplemento del Grupo Vocento Mujer Hoy número 595. Mujeres que no se detienen ante las dificultades de la crianza en un mundo consumista, mercantilista, homogeneizador. Amamantar largamente al bebe, renunciando con consciencia a otras cosas, haciéndose caso a una misma en lo más profundo, es un acto de insumisión. Igual que parir en casa, llevar a la criatura en un portabebés o dormir con ella. ¿Qué dirá Uriarte de las que, al reforzar el vínculo con sus bebés, llevarlos encima los primeros meses, dormir con ellos, son capaces de prescindir de los pañales porque saben cuando van a hacer pis y caca? ¿Dirá que se han rendido al “naturalismo imperante” y a los sentimientos de culpa?

Elene Ortega Gallarzagoitia © humorenlared.com

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