junio 15, 2012

Lady Auch: Gorda

Durante los años que ejercí de siquiatra conocí a mucha gente que merecía morir. Diagnosticaba y medicaba pacientes sin reparar en las necesidades individuales. Una chica.
Mis notas: “Convierte sus frustraciones en chorizo, donuts o patatas fritas que deglute por esa bocaza de puerca. Trata de llenar una vida de mierda carente de amor. No le basta con la puntita. Llama Marta a su vacío. En fin”.
Sus sesiones: “A las noches me reencuentro con Marta, en la oscuridad de mi habitación y de mi alma. Engullo lo que pillo por delante para alimentarla, pero nunca parece saciada, sigue pidiendo más, sigue llorándome a todas horas y en todos los lugares. A veces más bajito, y otras veces realmente alto. Siento que incluso los demás pueden llegar a oírla si me acerco demasiado a ellos. Por eso estamos mejor así, lejos de todos. Trato de dormirla a golpe de pastilla doctora pero de una manera u otra consigue salir la muy puta. Está totalmente descontrolada. Se siente amenazada. Vienen a por mí. Me han encontrado. Van a matarme no sin antes hacerme sufrir. Necesito un arma. El reflejo de los coches. ¿Qué demonios era eso? Nadie va a rescatarme. ¿Doctora? ¿Doctora Auch? ¿Está escuchándome?…”

Tania Peligero © humorenlared.com

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