Gora Euskadi: La toma de la pastilla
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| El titular en portada de EL CORREO del 3 de julio del año de la victoria provoca desasosiego. Viene a decir que un tercio de los vascos son unos ladrones. Lo que faltaba, volvemos a los año 80, cuando el Behitxo, el Zezentxu y el resto de kinkis del barrio atracaban farmacias día sí y día también. Si pasamos las hojas hasta llegar a la página 14, la cosa no mejora. El titular de la noticia hace que pasemos del desasosiego a la indignación. Resulta que ahora ese tercio de los vascos no es que sean unos ladrones, es que son unos gorrones. La autora de la información, después de redactar la perla periodística “Van a la farmacia sin dinero. No lo necesitan” nos dice que esta gente (se ve que gentuza le parecía fuerte) reciben los fármacos gratis. Gratis. Gra-tis. Es más, según el artículo, los parados sin subsidio y los perceptores de una renta de integración social, que antes pagaban hasta el 40% de los medicamentos, ahora se los llevan por la filosa. “Así lo ha decidido el Gobierno vasco al aplicar en Euskadi el único aspecto que acepta del decreto ley del Gabinete Rajoy sobre el nuevo copago farmacéutico”, parece lamentar la periodista, que habla de “gastos extra” y se autopregunta cómo es posible tanto derroche con esta crisis. Fármacos gratis, dice. En el texto no se habla de retenciones de IRPF. No se mencionan las cotizaciones a la seguridad social, ni el pago de impuestos indirectos, ni nada de nada. Según el artículo, cabe deducir que los pensionistas o las personas que hayan sufrido un accidente de trabajo, enfermedad profesional o síndrome tóxico son unos parásitos sociales que, aburridos de pasarse el día rascándose la ingle, no tienen otra cosa mejor que hacer que acudir a la farmacia a por medicamentos, la cosa es salir de casa, para socializar un rato con los boticarios y/o sus mancebos. Y ya de paso, terminar en el rincón más oscuro del parque o debajo de un puente, chutándose gelocatiles o esnifando Frenadol sin cortar, mientras se ríen a carcajada limpia de los pringaos del resto de comunidades autónomas que tienen que apoquinar el copago. Consigna: Todos a coger las horcas y las antorchas. Derribemos a quienes veamos con muletas y pinta de haberse caído de un andamio. Asaltemos los hogares del jubilado. Las aspirina es para el que la trabaja. Hay que saber leer entre líneas. Héctor Sánchez © humorenlared.com |
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