Psico: Insomnio
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 El insomnio es un trastorno del sueño que puede afectar a las personas a la hora de conciliar el sueño, de mantener el sueño a lo largo de la noche o de despertarse después de un número suficiente de horas de sueño. En contra de lo que pueda pensarse, no se considera que padezcan insomnio las personas que se despiertan durante la siesta sin haber apenas dormido tres horas seguidas. Ni aquellas que no consiguen conciliar el sueño apoyados en el baffle de una discoteca, a altas horas de la madrugada.Existen muchas causas de insomnio. Algunas de las principales son el estrés o los cuadros de ansiedad, por lo que la psicología establece que este trastorno no es una enfermedad sino un síntoma de otras afecciones físicas o psicológicas, como la depresión o la diarrea súbita. Las preocupaciones laborales, sexuales o económicas pueden contribuir a que sea más difícil mantener una buena higiene del sueño. «Uno de los métodos más controvertidos para combatir el insomnio es el uso de psicofármacos. Estos se pueden ser ingeridos por el paciente o bien pueden ser vendidos clandestinamente en aparcamientos apartados o callejones oscuros, contribuyendo a aliviar los problemas contables del insomne, que dejará de serlo según vaya engordando su cuenta corriente», explica Alex Tintor Rojo, psicólogo emérito del Hospital de Nuestra Señora del Perpetuo Zolpidem, aunque matiza que el método tiene sus pegas. Otras técnicas ajenas al uso de psicofármacos han demostrado su eficacia contra el insomnio. Así, las terapias cognitivo-conductuales suelen ser muy eficientes, siempre que se complementen con métodos de apoyo como la autoaplicación de golpes de karate en la base de la nuca, los martillazos en el occipital o el uso del cloroformo. Dra. Luisa Bergara © humorenlared.com |
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