octubre 15, 2013

Doctora Celia: Preliminares

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r156_celia_preliminaresLe propuse a mi pareja que viésemos cine para adultos antes del sexo. Aceptó, pero creo que entendió otra cosa. Ahora nos pasamos las noches viendo películas de Ken Loach o de Haneke. No solo mi libido ha ido en picado sino que he comenzado a preocuparme por el destino del ciudadano medio en el seno de una sociedad alienante. Ayuda.

Kepa Langana

Mal asunto. Si has desarrollado tolerancia a Fassbinder la cosa ya no tiene remedio. Siempre puedes montar orgías con otros miembros del cine club, pero ni todo el Viagra del mundo puede con Antonioni.

© humorenlared.com

 

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Oreja a la Plancha: Nunca lo sabremos

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La típica debacle de aparatitos que graban los conciertos para no se sabe qué es un tema sobre el que vuelvo mucho, pero hay una apreciación al respecto que me gustaría hacer: Se ha perdido la intimidad. Si antes decías o hacías cualquier chorrada salida de madre ante cien personas, todo quedaba en el recuerdo de los presentes sin más. Ahora corres el riesgo de “triunfar” en Youtube con cada pequeña ocurrencia. Esa sensación de hablar no para cien sino también para “ustedes en sus casas” es un efecto secundario de la tecnología en el que quizá muchos de esos “reporteros” no piensen, y tiene el tremendo impacto de cambiar el discurso del artista. En otras palabras, el concierto que grabas es distinto del que disfrutarías si no lo estuvieras grabando. (Más…)

octubre 14, 2013

Cómic: Anna Mercury

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r156_comic_annamercuryANNA MERCURY
Ellis & Percio
Glénat

A Warren Ellis, artífice de Transmetropolitan o Planetary, le encanta construir mundos en los que vivir puede convertirse en un ejercicio de sadomasoquismo solo apto para fanáticos de la tecnología, las conspiraciones, las armas de gran poder destructivo y el látex brilante. Y es que el británico no se aparta ni un milímetro de esa fijación que tiene de situar sus tramas en antiutopías aberrantes cuando crea a Anna Mercury. La joven en cuestión es una exuberante pelirroja (un estilo a la protagonista de Brave pero encuerada de la cabeza a los pies) que maneja dos pistolas automáticas con gran poder de convicción. Y la verdad es que puede estar contenta de su currículum. Puede que no hable mandarín fluido ni tenga un curso de mecanografía, pero ser capaz de nublar la mente de las personas, saltar de edificio en edificio o desaparecer en una habitación abarrotada la convierten en la agente de intervención perfecta. (Más…)
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Revista El Karma