La Coordinadora de ONG para el Desarrollo, la Plataforma del Tercer Sector y la Plataforma de Organizaciones de Acción Social han llegado a un acuerdo histórico con el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 por el cual se permitirá a los ciudadanos que colaboren con Organizaciones No Gubernamentales acumular puntos de incivismo. Estos puntos podrán guardarse o cambiarse por acciones tales como poner la zancadilla a ancianas invidentes cuando van a cruzar la carretera, lanzar globos de agua con salfumán desde la ventana o colocar cristales en la rampa de los toboganes de los parques infantiles.

Buenismo con desahogo

La medida pretende fomentar el asociacionismo autofinanciado no dependiente del dinero público, que permita al Estado delegar en terceros cuestiones como la gestión del aumento de la pobreza, la precarización del empleo y la depauperización de servicios educativos y sanitarios, “ofreciendo contrapartidas a la ciudadanía, como poder comportarse como auténticos hijos de la gran puta en función de los puntos que atesore”, explica Elvis Tagorda, adjunto a la Secretaria General Técnica del ministerio. Tanto Justicia como Interior elaborarán un directorio de nombres y puntuaciones que estará disponible para agentes del orden, jueces y miembros de la fiscalía, de forma que quienes figuren en él puedan ser exoneradas de delitos y faltas en función de su saldo.

“El asesinato está feo. No lo aprobamos, ni los alentamos, ni nos parece que sean formas de afrontar las cosas entre personas. Pero hombre, si se está pagando la cuota de ACNUR, de Acción Contra el Hambre, Greenpeace, Médicos Sin Fronteras, Amnistía Internacional, FAADA, OCU y Cáritas, y es algo puntual, algún incentivo tendrá que haber”, concluye Tagorda.

© elkarma.eus