Antropófagos por la Restitución de la Moral (ARM) ha denunciado la celebración de un acto de renovación carismática católica oficiado por el párroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Luz, en Guía de Isora, Tenerife, en el que se equiparaba el canibalismo con la homosexualidad. En un comunicado, la coordinadora nacional de ARM, Araceli Gadillo, considera que este tipo de “actos de renuncia” son susceptibles de un delito de odio contra el colectivo de caníbales y apela a las autoridades eclesiásticas y civiles para que investiguen estos hechos y tomen “las medidas necesarias”.

La carne en el asador

El colectivo denunciante considera inaceptable que en pleno siglo XXI se sigan promoviendo actitudes que fomentan la discriminación, la estigmatización y el odio hacia el colectivo antropófago “comparándolo de manera indecente y denigrante con esos degenerados de los sodomitas”. La petición de ARM de abrir una investigación a fin de destituir al sacerdote ha sido apoyada por agrupaciones de caníbales de todo el estado, que consideran su homilía un acto contrario a las enseñanzas de amor y aceptación que deberían prevalecer en cualquier comunidad religiosa. “Es intolerable. Miren, lean. Levítico 20:13. “Si alguno se acuesta con varón como los que se acuestan con mujer, los dos han cometido abominación; ciertamente han de morir”. Y ahora, denme un momentito… Aquí. Mateo 26:26. “Tomad y comed todos de él, porque esto es mi cuerpo, que será entregado por vosotros”. ¿Ven? Este cura no sólo es un intolerante sino también un incompetente”, argumenta Gadillo.

Feligreses de Guía de Isora se encuentran a la expectativa de saber cuál de las dos tendencias deberán ocultar a los vecinos a partir de ahora por el qué dirán.

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