Fuentes cercanas al entorno de María del Monte han informado de que Michael Corleone, empresario neoyorkino, ha mantenido una reunión a puerta cerrada con la tonadillera en su domicilio de Gines. El motivo del encuentro habría sido la voluntad del filántropo italoamericano de formar a María del Monte en gestión interparental y advertirle encarecidamente de que nunca, jamás, en la vida, se debe fiar de la familia. La artista se encuentra aún asimilando que su propio sobrino, Antonio Tejado, actualmente en prisión, haya formado parte de la banda que asaltó y robó en su casa el pasado mes de agosto y considera que el de Corleone es un consejo que no ha podido rechazar.

Te rompen el corazón

Michael Corleone, que se ha presentado en Sevilla con un séquito de consejeros, guardaespaldas y un abogado que se ha mostrado muy interesado por los caballos andaluces alazanes, habría mantenido una animada charla con la intérprete de Cántame en la que se ha sincerado y ha contado anécdotas de su propia vida. “Ha empezado a soltar una turra sobre un tal Fredo, pero he perdido el hilo y no he recuperado el interés hasta que no ha empezado a hablar algo de un beso en la boca una nochevieja por no sé qué movida que habían tenido en Cuba, y luego se ha puesto a contar un día en que salieron a pescar y ahí ya he desconectado”, comentaba una empleada del servicio doméstico mientras Inmaculada Casal, pareja de María del Monte, la miraba con ojos severos y apretaba el dedo índice contra sus labios cerrados.

El magnate del negocio de la importación-exportación se ha despedido de la cantante de sevillanas diciéndole que algún día, y tal vez ese día nunca llegase, le pediría que hiciera algo por él, pero María del Monte ya se había puesto a mirar el móvil.

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