Cerrado el escrutinio oficialmente, más del 40% de los casi 8.000 votos nulos contabilizados en las elecciones al Parlamento Vasco se corresponden a cartas remitidas por las haciendas forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa para la declaración de la Renta. “En su totalidad son misivas que indican al contribuyente que le da a pagar”, detalla la portavoz de la Junta Electoral del País Vasco Amaiur Nabeteta. El hecho de que ni un solo votante haya incluido la carta en la que se le informa de que la declaración le ha dado a devolver ha llamado la atención de la socióloga Marife Tichista que lleva estudiando votos nulos desde 2014. “Podría ser algo premeditado”, susurra preocupada.

Urna cosa te digo

Amaiur Nabeteta dice que todo el 60% restante de votos nulos emitidos en la Comunidad Autónoma Vasca corresponden a la “habitual panoplia” de fotos de candidatos con mensajes eróticos, papeletas tachadas total o parcialmente, papeletas rasgadas “con diverso grado de ira” y las “ya clásicas” rodajas de chorizo y/o “peladuras de mandarina en el caso del votante presuntamente vegano”. Marife Tichista cree que la coincidencia de la campaña de la Renta con la electoral ha podido exacerbar los ánimos de algunos votantes. Su compañero Periko Riikalari no descarta, especialmente en el caso de la Bizkaia post-gabarra, que la carta de la Diputación haya llegado junto con la propaganda electoral y el votante, “de resaca”, la haya metido en el sobre sin intenciones aviesas.

Rikalari, que colabora con Tichista en la clasificación del material nulo obtenido, “ni confirma ni desmiente” que entre los dos votos nulos registrados en Orexa, Gipuzkoa, se haya encontrado un borrador de la carta publicada por Pedro Sánchez el 24 de abril.

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