Una joven que había acompañado a su amiga actriz al casting de una película ha descubierto horrorizada cómo no le han dado a ella el papel para el que se postulaba su conocida. La mujer, empleada en una tienda de Zara y sin ningún tipo de experiencia ni interés por el arte dramático, confiaba en que en algún momento de la prueba, vistas todas las candidatas, el director de casting se acercase a ella cuando ya se disponía a abandonar el recinto junto a su amiga, rechazada, le harían una prueba fuera del plan, todo el equipo quedase sorprendido por su frescura y obtendría el papel que la catapultaría a la fama. Contra todo pronóstico, nada de esto ha sucedido y la joven se siente decepcionada por una profesión cruel que convierte a las personas en juguetes rotos.

Escándalo sin precedentes

La Unión de Actores y la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España (AACCE) se han reunido de urgencia para exigir explicaciones a la productora y a los responsables del casting que no han elegido a la vendedora de ropa low cost para protagonizar su película. “Es una vergüenza y un desprestigio para el mundo del cine en general y para quienes fantasean con contarle a Pablo Motos en El Hormiguero la anécdota de cómo llegaron a convertirse en estrellas en particular”, ha declarado Fernando Méndez-Leite, presidente de la Academia.

La amiga actriz de la joven agraviada asegura sentirse “superdisgustada” por el hecho de que no le hayan dado a su amiga el papel al que ella misma aspiraba. “Después de todo, los actores y las actrices somos almas libres, sin ego, y nada me hubiese hecho más feliz que ver a mi camarada triunfar sin necesidad de dedicar el tiempo y el dinero que yo he dedicado a encadenar cursos de teatro”, concluye llorosa gracias al colirio.

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