Mercadona, que continúa con su plan de crecimiento internacional tras la operación portuguesa del año pasado, hará extensivas sus estrategias promocionales a los nuevos locales que inaugure en Europa del este. Sus establecimientos en la región de Donetsk, emplazamiento elegido por la cadena que preside Juan Roig para continuar su expansión aprovechando la caída del precio de los alquileres pese a la gentrificación por el turismo ruso, adoptarán el “reto de la piña” para ligar en el supermercado, sólo que se sustituirá la fruta tropical por una granada de mano. La alteración de la propuesta original del equipo de marketing pretende suplir el desabastecimiento de piñas de la frontera oriental ucraniana, a la vez que adaptar el reto viral a la idiosincrasia cultural de la zona.

Seducción programada

Dos semanas después de triunfar en España, el peculiar fenómeno, que se ha propagado en plataformas como TikTok e Instagram, consistente en que los solteros se identifiquen colocando una granada de fragmentación RGD-5 boca abajo en sus carritos de la compra entre las 7 y las 8 de la tarde, se ha convertido en una multitudinaria convocatoria que ha desbordado la capacidad de los supermercados de Mercadona recién inaugurados en los raiones (distritos urbanos) de Budiónivski, Voroshílivski, Léninski y Kírovski.

“Ligar no es fácil, y hay que aprovechar a tope los escasos permisos que tenemos después de estar pegando tiros en el frente de Kursk. Por eso lo de la granada en el carrito es superútil y muy divertido. De vez en cuando nos dejamos llevar por el estrés postraumático y cuando se nos acerca otro carrito por el flanco quitamos la espoleta a la granada y se la lanzamos, pero eso pasa muy de vez en cuando”, explica Dimitr Nigalgonipodenko, joven casadero en edad de merecer.

© elkarma.eus