El CERN, la Organización Europea para la Investigación Nuclear y mayor laboratorio de física de partículas del mundo, ha confirmado que miles de calcetines sueltos están cruzando vórtices interdimensionales generados en tambores de lavadora. Aparentemente desorientadas, estas prendas de vestir, cuya desaparición ha sido denunciada por sus propietarios a lo largo de varias décadas después de haberse volatilizado tras hacer la colada, han comenzado a aparecer de repente en domicilios de toda la geografía mundial. El acontecimiento vendría a confirmar de una vez por todas que las lavadoras generan una singularidad en el espacio tiempo durante el centrifugado que explicaría que muchos calcetines cruzasen portales a través de rasgones en el tejido de la realidad.

La ciencia está en ello

Las autoridades de aquellos países en los que se han producido episodios de materialización de calcetines ya han iniciado los protocolos de repatriación para entregar los calcetines a sus legítimos dueños. A pesar de que el Laboratorio Nacional Fermi y otros prestigiosos centros de investigación de física teórica trabajan ya con modelos de trabajo que aplican la Teoría de Cuerdas, la Teoría de Inflación Cósmica y la Teoría de la Superconductividad, aún no se ha determinado el patrón que establece las conexiones entre los vórtices de entrada y de salida, lo que está dificultando las tareas de identificación de los calcetines reaparecidos.

“Era de lana, tobillero, con dibujos de Las Super Nenas, lo que estaba de moda en la época. Denunciamos sus desaparición un 19 de marzo de 1999. Ayer nos informaron de que ha aparecido dentro de la lavadora de una casa de České Budějovice, en la República Checa. Está muy asustado y no sabe cómo ha ido a parar allí”, explica un vecino de Móstoles que no sabe cómo le va a contar cuando vuelva a casa que tiró a su pareja a la basura hace más de veinte años.

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