Famosos de Hollywood como Billy Crystal, Anna Faris, Ben Aflleck, Ricki Lake o Anthony Hopkins ya han comenzado a mudarse al barrio de Skid Row en Los Ángeles para comenzar una nueva vida como homeless. La pérdida de sus casas en los cinco incendios que han arrasado el condado, reduciendo a cenizas Pacific Palisades, Altadena, las colinas que presiden Hollywood Boulevard y Pasadena, ha obligado a las estrellas del espectáculo a convertirse en personas sin hogar que a partir de ahora deambularán sin rumbo por Venice Beach, Sunset Boulevard y el mencionado vecinadario del Downtown con carritos de la compra llenos de sus enseres personales. La consabida capacidad de resiliencia de los famosos de Hollywood ha hecho que muchos ya estén reproduciendo la estética de sus destruidas mansiones con cartones que encuentran en contenedores.

Sólo es un bache

Aunque no se trata de una tarea fácil, debido entre otras cosas a la cantidad de famosos que se han convertido en homeless al mismo tiempo y al caos que ha provocado el fuego, que continúa descontrolado en algunas zonas, las estrellas hollywoodienses ya se han repartido las esquinas de la calle donde van a residir a partir de ahora y abarrotan las papelerías para asesorarse sobre el mejor tipo de cartón con el que construirse sus palacetes. También pedirán limosna, aunque ellos prefieren llamarlo crowdfunding o micromecenazgo.

“Creo que para reproducir mi palacio de dos plantas de estilo medieval de Malibú asolado por el Sunset Fire lo mejor va a ser el cartón corrugado de los embalajes de frigoríficos. Con un toque de cartón de nido de abeja del de estabilizar palets para los detalles arquitectónicos”, explica Mark Hamill, que ya ha elegido un callejón con musgo asomando por las juntas de los adoquines y un socavón inundable por fugas de canalones para emular el jardín y la piscina.

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