La Policía y la Fiscalía han abierto una investigación contra Mediaset y la productora Cuarzo por un presunto delito continuado de proxenetismo. Según fuentes próximas al Ministerio de Justicia, Telecinco, la cadena que emite La Isla de las Tentaciones, llevaría desde 2020 obteniendo beneficio económico de la prostitución a costa de otras personas sometidas a explotación sexual y conocidas como “tentadores” o “tentadoras”. De ser encontrados culpables, los acusados podrían enfrentarse a penas de hasta 5 años de prisión. Según el juez que ha ordenado la investigación, estos tentadores no sólo son sometidos a la denigración de tener que comerciar con su cuerpo sino que deben soportar reproches por aposentar sus genitales en la nunca de otros clientes o sufrir las amenazas de señores que corren por la playa con la camisa abierta.

Todo el peso de la Ley

Aunque el proceso en curso ha vuelto a encender la polémica entre partidarios de legalizar la prostitución y defensores de su abolición, la Fiscalía asegura que se plegará al Código Penal vigente. “Es un drama que por desgracia ya hemos visto muchas veces. Jóvenes con una maleta cargada de sueños y unos cuerpos de escándalo son manipulados por redes de trata que les prometen una vida mejor a cambio de acostarse con personas que no conocen”, declaraba el ministro Félix Bolaños. Los tentadores no podrían negarse, al tener que plegarse a contratos leoninos. Mantienen, por tanto, relaciones sexuales a cambio de dinero y, lo que es peor, “lo hacen delante de millones de espectadores, como en una gran y humillante bukkake”.

Cadenas de televisión suecas han decidido cautelarmente suspender las negociaciones para adquirir los derechos de emisión del programa porque los propios concursantes tendrían que ser condenados a multa y cárcel.

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