Un hombre de mediana edad del municipio bizkaino de Barakaldo está viviendo con angustia el paso de las horas y los días después de que el pasado sábado el teclado predictivo de su teléfono móvil le vaticinara que un autobús le atropellará este jueves. La predicción del teclado no especifica el lugar concreto ni la hora en que tendrá lugar tan terrible suceso, por lo que el hombre continúa escribiendo mensajes aleatorios en WhatsApp para intentar que alguno de los textos clarifique más el horizonte de sucesos anticipados para el fatídico día de autos (concretamente esos autos grandes en los que se monta mucha gente y te cobran cuando entras). El afectado asegura que vivía mucho más feliz cuando permanecía ignorante ante el devenir del destino y que en mala hora se le ocurrió cambiar la configuración del teclado para ganar tiempo al escribir.

Haber elegido susto

El departamento de atención al cliente de Samsung, la marca del celular del receptor del presagio, ha comunicado al usuario que la capacidad clarividente de este tipo de textos no afecta sólo a los móviles de su empresa sino que es común a los de todos los fabricantes del mercado, y que de hecho tampoco sucede únicamente con los terminales de Android sino también con los iPhones de Apple. “¿Por qué se cree la gente que se le llama texto predictivo? Es que claro, no nos leemos la letra pequeña de las condiciones de uso y luego vienen los lloros. ¿Perdón? Presbicia mi coño moreno. Pereza y dejadez, hostia. Que le hacéis a una hablar mal”, comunica Rebecca Lamidad, coordinadora de servicio técnico de un call center de Movistar.

Los conductores de autobús del municipio han sido advertidos mediante nota interna de que, pase lo que pase el jueves, no se les quede mala conciencia porque la providencia es lo que tiene.

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