El magnate Elon Musk ha pedido a la empresa Colossal Biosciences que desextinga ahora el feudalismo. El jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental considera que si han logrado revivir al Lobo Gigante “resucitar una sociedad estamental no puede ser tan difícil”. Musk cree que aún quedan suficientes aristócratas en Europa de los que extraer el ADN e incubar embriones en laboratorio. Las muestras genéticas se obtendrían en principio “por las buenas” pero no se descarta el uso de la fuerza. El millonario sudafricano considera que los desextintos lobos de Juego de Tronos necesitan ahora un hábitat acorde “porque lo contrario sería antiecológico y cruel”.

Sí se puede

El logro anunciado en X por Colossal, portada de Time, podría ser la punta de lanza que utilizase el régimen de Trump para devolver a la vida “otras cosas que llevaban muertas mucho tiempo y parecía que nunca iban a volver pero ahora parece que sí”. El desafío propuesto a la compañía biotecnológica pasaría por extraer células madre de nobles del viejo continente “a partir de muestras de semen, lo de por las buenas, o de sangre, lo de por la fuerza”, según ha comentado el propio Musk. “Fácil, lo que se dice fácil, no va a ser. Ya ha resultado bastante jodido sacar material genético de un fósil de 12.000 años como para intentar obtenerlo de Margarita II de Dinamarca”, comunicaba dubitativo Ben Lamm, CEO de Colossal Biosciences mientras trata de explicarle a Musk que la tecnología CRISPR no tiene nada que ver con cereales de desayuno.

Elon Musk es conciente de que desextinguir el feudalismo por ingeniería genética es un primer paso y que debería seguirle una reforma legislativa, como la reinstauración de los derechos de vasallaje, los diezmos o el impuesto de pontazgo, “pero esa sería la parte fácil”.

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