Asociaciones de epidemiólogos han publicado un manifiesto en el que denuncian el bullying constante al que son sometidas las enfermedades raras. Estos profesionales sanitarios piden a las enfermedades ordinarias que no se burlen de las otras patologías por el mero hecho de ser diferentes. Desde el Ministerio de Sanidad se ha lanzado la campaña ‘Rara no, especial’ con la que se pretende concienciar sobre el respeto a las dolencias minoritarias. Investigadores en salud pública recuerdan que la discriminación no tiene cabida en un organismo en el que todas las enfermedades deberían convivir en armonía y solidaridad mutua.

Menos prejuicios, más abrazos

La campaña institucional, dirigida especialmente a enfermedades normativas como la gripe, la cardiopatía isquémica, la diabetes o la hipertensión arterial tiene como objetivo generar un espacio de entendimiento libre de agresiones, mofas, befas e insultos. “Ninguna enfermedad es menos que otra por el simple hecho de ser rara. Todas tienen el mismo objetivo, que es parasitar a un ser humano sano. El mismo derecho tiene el Síndrome de Kallmann o el Lupus erimatoso sistémico de volver miserable la existencia de las personas que, por ejemplo, el sarampión o el asma”, suscribe la ministra de Sanidad, Mónica García. La campaña, que estará presente a través de cartelería en centros de salud, residencias de ancianos, medios de transporte públicos, guarderías, saunas, vertederos y piscinas municipales, se completará con talleres formativos a los que podrán asistir de manera gratuita enfermedades mainstream que deseen deconstruirse.

Varias cepas de catarro común han calificado la iniciativa ministerial de “woke” y “buenista”, y denuncian que hoy en día ya no se puede hacer chistes sobre nada.

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