Las básculas electrónicas informarán a partir de ahora del peso del usuario y del de un cetáceo seleccionado aleatoriamente. La medida parte de un acuerdo entre la Asociación Española de Coordinación de la Industria del Pesaje (AECIP) y el Ministerio de Sanidad dentro del marco del Plan Estatal de Empoderamiento Ciudadano. Las nuevas básculas estarán disponibles en todas las farmacias a partir de mayo. Los propietarios de balanzas domésticas podrán acogerse al Plan Renove que el Gobierno pondrá en marcha a lo largo del mes de junio. De este modo se amortiguará el impacto de saber que no se ha perdido ni un gramo desde las pasadas navidades pero que los cachalotes o las ballenas jorobadas viven felices y desacomplejadas.

Una cosa por la otra

La actualización de los dispositivos de pesaje cuenta con el beneplácito de la Asociación Española de Fabricantes de Básculas y Balanzas (AEFBB) dentro de su compromiso con las campañas institucionales contra la gordofobia. El Plan Estatal pretende evitar que las personas con sobrepeso se frustren durante los meses previos al comienzo de la temporada estival y caigan en la tentación de solicitar una baja por depresión, en detrimento de la productividad y el PIB. “Que la báscula te diga que pesas 108 kilos y que la dieta Keto que llevas haciendo desde febrero no ha valido una puta mierda se lleva mejor si a continuación te informa de que la ballena azul puede llegar a alcanzar las 173 toneladas y no la oirás lamentándose y diciendo que ya no le cabe el bañador del verano pasado”, explica Consuelo Malmenor, portavoz de la Asociación Nacional de Dietistas Por el Autoengaño (ASNADIPA).

La International Whaling Commission (IWC) ha comunicado su protesta contra la medida y alega que hace un “flaco favor” a la autopercepción de los cetáceos.

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