Varias plataformas ciudadanas, asociaciones de vecinos y población civil siria en general han decidido hacer un crowdfunding para financiar una eventual visita del Papa Francisco al país. La iniciativa pretende que el viaje pastoral les conceda unos cuantos días de paz, como ha sucedido en Irak, “y poder aprovechar para ir al súper, o hacer papeleos o a visitar a la familia sin tener que estar pendientes de a qué hora es el bombardeo y si te da tiempo a pasar por la pescadería”.

Gasto por la paz

Los creadores del proyecto de micromecenazgo han pedido 22 millones y medio de dólares en Verkami, euro arriba, euro abajo, tomando como referencia el presupuesto para canapés de la visita de Benedicto XVI a Valencia. “No sabíamos que los Papas tenían tanto caché, pero bueno, por algo será, lo importante es que venga, se haga una gira de bolos por Alepo, Idlib, Al Raqa y Damasco, y a nosotros nos dejen a nuestro aire unos días, que, aunque llevamos diez años así, la gente no termina de acostumbrarse a que la revienten de un morterazo. Manías nuestras…”, explica uno de los autores de la idea que prefiere mantenerse en el anonimato “porque uno nunca sabe si se va a encontrar con un hater ruso o con uno estadounidense, y como fijo, fijo, fijo que a alguno le ofendes pues mejor callarse el boquino y no dar nombres”.

Aunque el Vaticano no se ha pronunciado al respecto, fuentes cercanas al camarlengo de Su Santidad aseguran que, de cancelarse finalmente el Festival de Benicàssim en 2021, a lo mejor podría recuadrar agenda, aunque sin compromiso.

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