Los resultados de la última encuesta del CIS están obligando al Gobierno de Pedro Sánchez a valorar una nueva crisis de Gobierno. De acuerdo con el análisis estadístico del Centro de Investigaciones Sociológicas, los nombres de muchos de los ministros y ministras son tan comunes y vulgares que resultan cada vez más difíciles de recordar, lo que provoca que la ciudadanía no sea capaz de desarrollar empatía hacia los titulares de las carteras y, por lo tanto, pierda interés en los asuntos de la cosa pública.

Memoria selectiva

“Presten atención. Yolanda Díaz, Raquel Sánchez, Isabel Rodríguez. Por no hablar del saliente José Manuel Rodríguez. Ya. ¿Recuerdan alguno de los nombres que acabo de decir? No, ¿verdad? Pues son ministras y ministro que salvaguardan, o han salvaguardado, el destino de todos los súbditos del Reino de España. Pero con esos nombres tan poco memorables normal que a la gente le importe una mierda lo que hagan…”, comenta Hermenegildo Cacharro Pechoabierto, sociólogo y hagiógrafo aficionado de vidas de santos alcarreños de la Alta Edad Media. “Manuel Fraga Iribarne, Isabel Tocino, Santiago Carrillo, Gregorio Peces Barba, Soledad Becerril, Javier Moscoso… ¡Esos son nombres de prócer, joder! ¡De esos sí que te acordabas, coño! ¡Me van ustedes a comparar! Que no nos extrañe que la ciudadanía no se implique en la política, si el rumbo de sus vidas lo marca gente que se llama como su peluquero o su cuñada”, continúa Cacharro con una mezcla de rabia e impotencia, quien apunta que la culpa es de la sociedad democrática “por haber dejado que gobiernen personas que se llamaban Felipe González, José Luis Rodríguez o, mentemos al elefante en la habitación, Pedro Sánchez…”

Moncloa ha declarado que sólo se procederá a un nuevo cambio de ministros en última instancia. Como medida de urgencia para trabajar con la memorabilidad, los nombres de los ministros y ministras aparecerán a partir de ahora unidos a un mote o apodo, que la ciudadanía podrá elegir en www.lamoncloa.gob.es. El listado de alias aparecerá en breve publicado en el BOE.

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