El Centro Nacional de Inteligencia ha comenzado a desclasificar documentos al haberse cumplido el plazo máximo de antigüedad de secretos de Estado y ha puesto a disposición de la ciudadanía, de manera pública, el contenido de los mismos. Uno de los archivos desclasificados más polémicos es el que revela que la espera de dos horas que los niños debían guardar después de comer para poder bañarse en el mar o en la piscina no obedecía a razones de prudencia sanitaria sino a la necesidad de salvaguardar la siesta, sin sobresaltos, de padres y tutores legales.

Pasmo y estupefacción

“El servicio secreto tiene estas cosas. A veces hay que mantener a la población a oscuras con respecto a asuntos delicados que no podrían entender de otra manera. No es un tarea grata pero todo sea por la seguridad nacional”, manifiesta Anselmo Ycano, agente del CNI especializado en tareas de contraespionaje e infiltración, mientras se disfraza de enfermero sexy para una misión de vigilancia en el Hospital Zendal. La confidencialidad de estos documentos ya había quedado comprometida en 2006 con las filtraciones de WikiLeaks, durante la que pudo haber sido una de las crisis más graves vividas por el Ministerio del Interior. “No queremos ni pensar en qué hubiera pasado si la indiscreción de Assange hubiera hecho público que los niños podían bañarse aún con los macarrones en la boca. Los padres sin siesta ni cubalibre de después ni partida de tute ni nada. Pendientes de los cafres de sus hijos, sin descansar un minuto… Con lo que eso hubiera repercutido en la productividad tras la reincorporación al trabajo pasadas las vacaciones. Un desastre…”, especula Ycano mientras se ajusta el estetoscopio de goma.

Otros de los archivos desclasificados son la verdadera naturaleza del ratoncito Pérez, en realidad una chinchilla entrenada por el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos, o la inexistencia del hombre que regala droga a la puerta de los colegios, un falso mito creado por el gabinete de Francisco Fernández Ordóñez durante la crisis inflacionista de 1977.

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