La Organización de Consumidores y Usuarios se ha hecho eco de la iniciativa del Consejo de Ministros de modificar la Ley de Ordenación del Comercio Minorista, que permitirá a los establecimientos comerciales limitar las unidades máximas por artículo que pueden ser adquiridas por cada comprador, y ha pedido a la población que “sea responsable y no compre masivamente productos de primera necesidad” porque “si espera a que el clima degenere y se inicien los saqueos de supermercados la cesta de la compra le sale mucho más barata”.

Paciencia y moderación

La psicosis de muchos ciudadanos que han acudido a establecimientos para hacerse con todas las existencias de leche o aceite de girasol, por miedo a futuros desabastecimientos a causa de la guerra de Ucrania o la reactivación de la huelga de transportistas, ha sido calificada de “irresponsable, prematura y corta de miras”. “Es una estupidez acudir a centros comerciales para vaciar las baldas, con el actual incremento de precios, cuando, en el caso de que la situación en Europa empeore, se puede ir tranquilamente al súper de tu barrio, reventar la luna con un adoquín y arramblar con todo tipo de productos sin coste alguno”, explica Armando Bronca, experto en consumo y en la elaboración casera de sudaderas con capucha. Aunque los expertos se mantienen escépticos ante la posibilidad de que el conflicto bélico se extienda a todo el continente, con una eventual escalada nuclear, recomiendan asaltar primero armerías “porque así el saqueo de grandes superficies comerciales se optimiza mejor”.

La OCU recomienda aprovechar la rebaja de 20 céntimos por litro de carburante para hacer acopio de cócteles Molotov.

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