Empresas productoras de arena de sílice participarán en un concurso público convocado por la subsecretaría del Ministerio del Interior para abastecer de arena a los colegios electorales para que puedan simular playas el próximo 23 de julio. Las compañías fabricantes se han comprometido al suministro de arena siempre y cuando la gestión de las piscinas portátiles con agua salada corra a cuenta de la Dirección General de Política Interior. La iniciativa, que parte de la Junta Electoral Central, pretende desalentar la abstención, evitar situaciones tensas y estimular el espíritu democrático.

Planazo de domingo

Según fuentes cercanas a Moncloa, Strobel Quarzsand GMB, Silmin Ibérica S.L. y Sílices Serral ya habrían presentado proyectos para hacerse con la contrata. El órgano superior de la Administración Electoral, de las Juntas Electorales Provinciales, las Juntas Electorales de Zona y, en su caso, las Juntas Electorales de Comunidad Autónoma, ha querido destacar el ambiente festivo que se quiere generar durante la jornada electoral del 23J, aunque ha pedido a la ciudadanía que respete las normas mínimas de convivencia. “La gente puede tumbarse un rato en la toalla después de votar. E incluso meterse en la piscina, aunque sin acaparar. Lo que quedará terminantemente prohibido será saltar haciendo la bomba cerca de las mesas de papeletas, traerse barbacoa, hacer topless y cambiarse el traje de baño en las cabinas de votación”, informa Sandra Gaminas, funcionaria en la Oficina del Censo.

Se desaconseja también jugar a las palas o al frisbee junto a las urnas y se pide que se respeten las banderas que los interventores de mesa se encargarán de ir cambiando para que la experiencia sea totalmente inmersiva.

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