La junta directiva de la LERDA (Liga para la Extensión de Remedios de Dudosa Aplicación) ha declarado que el ayuno intermitente puede practicarse con la ducha intermitente siempre y cuando se hagan en días alternos. “Es lo mejor para mantener una convivencia medianamente aceptable en el núcleo familiar”, subraya Josema Gufo, secretario general de la organización. Los debates han sido intensos porque un sector de la LERDA apostaba por “acentuar las contradicciones” con el enemigo interior, el exterior y el cosmos entero. “Muchos que no han visto la luz necesitan un empujón”, advierte la representante del sector crítico Mariela Vativas.

Desearlo muy fuerte

El sector oficialista de la LERDA cree que es deseable que cada individuo se centre en una única terapia alternativa, o como mucho dos si son pequeñas, para mantener un mercado lo más diversificado posible. “Flores de bach y piedras energéticas es bien. Si ya añades la búsqueda del orgón puede que acabes arruinado y dejes de ser útil a la, ejem, ciencia”, explica Josema Gufo. El sector crítico agrupado en torno a Mariela Vativas y el gurú Greto Chünger cree que “ya hay masa crítica” para acercar a las masas al terraplanismo, aunque no le reconozca todavía el corrector de Word. “Los Eloim no volverán a salvarnos solo con desearlo muy fuerte. Necesitan una enorme pista de aterrizaje compartida por toda la humanidad. Si no, puede darse la vuelta…”, advierte Chünger.

La decisión de la LERDA sólo afectará a las personas mayores de edad. Los adolescentes con resaca que ya practican ambas terapias porque así es la vida tendrán que federarse al cumplir los 18 años. Si no, no tendrán sitio en la astronave.

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