julio 13, 2022

Campus Kanpo: Monotema particular

columna_mom_cabecera_gr

Acabo de ser madre. Sí, estoy en ese momento monotema. No huyáis, cabrones; seguid leyendo. Que yo soy la primera que intento socializar para “salir” de esta burbuja de lloros, leche y pañales. Sin embargo, todos me preguntáis lo mismo: ¿A quién se parece? ¿Es bueno? ¿Y qué tal duerme? Y al final, vosotros os lo buscáis y hablo de mi nueva realidad, acabando con el típico “es duro pero merece la pena”.

Ahora mismo, no puedo contar nada de la actualidad informativa. No leo (ni veo, ni escucho) nada relacionado con lo que pasa en el mundo desde que nació el baby. No puedo hablar de la Guerra de Ucrania, de la vuelta del Rey emérito, de los chanchullos de la derecha, de las huelgas de trabajadores o de la subida de la luz y gasolina. Mejor os cuento que tengo las tetas doloridas, estoy siempre despeinada, ya no sé lo que es ir al baño tranquila y me acuesto cuando todavía es de día. Eso sí, si me bebo una sola cerveza ya estoy “alegre”; mi monitora de aquagym me dice que he “aflacao”; y tengo un renacuajo del que estoy enamorada, a pesar de que sólo diga “aita”.

Embarazo, parto, lactancia y… Sí que es complicado luchar contra el patriarcado, sí.
(Más…)

abril 6, 2022

Campus Kanpo: Cuán gilipollas

columna_mom_cabecera_gr

¿Cuáles son las tendencias de búsqueda de Google que nos muestran cuán gilipollas somos? En este momento: “sorteos loterías”, “Raquel Bollo”, “precios luz hoy”, “horóscopo diario aries” y “ucrania rusia kiev”.

En primer lugar, nos interesa saber si ya somos ricos. Da igual que sea el fin del mundo o no, todos soñamos con que nos toque “un buen pellizquito”.

Luego, Raquel Bollo, que debió de ser esposa de Chiquetete. Parece ser que le debe mucha pasta a su ex casero. Qué raro. La gente de este mundillo es muy discreta y no le gusta vivir por encima de sus posibilidades. (Más…)

enero 4, 2022

Campus Kanpo: Bailar de lejos

columna_mom_cabecera_gr

Para una amante de la música, estar en el concierto de mi grupo favorito debería ser una de las mejores experiencias vitales. Cerrar los ojos, dejarse llevar, gritar con ganas, compartir el espacio con personas del mismo rollo. Bien, ¿no?

Apuras los minutos para ir porque ya no puedes beber alcohol en la cola. Y claro, todo el mundo piensa igual y te comes una fila kilométrica apenas quince minutos antes de que empiece el concierto (ponle el sentido que quieras… o ninguno). Pero empiezan a sonar esos acordes y todo cambia. Salto y canto con ganas. Y me ahogo. Gracias, mascarilla. (Más…)

« Página anteriorPágina siguiente »