Aunque la comunidad científica no termina de ponerse del todo de acuerdo, parece probado que el tiempo atmosférico afecta al estado de ánimo. El tiempo meteorológico altera el sistema vegetativo y las variaciones en la electricidad atmosférica pueden desequilibrar la ionización del cuerpo humano, afectando al ritmo cerebral y cardíaco, a la resistencia de la piel, cambiando el metabolismo e incluso provocando perturbaciones en la polaridad de la membrana celular. Y por supuesto afectan al estado de ánimo de las personas.
El doctor en psiquiatría Keanu Barrón, de la Universidad de Honolulu, postula que, en cualquier caso, existen individuos especialmente meteorosensibles. “Un día de tormenta caminaba junto a un paciente que pensaba lanzarse de un viaducto… (Más…) |