Cuando te coproduce el disco Ricky Falkner (exmiembro de Standstill), entre tus influencias se encuentran My Morning Jacket o The National, y la crítica dice que tu estilo entra dentro del campo semántico de gigantes (unos más que otros) como Luis Brea, Xoel López, Izal, Love of Lesbian o Vetusta Morla, nada puede salir mal. El segundo larga duración de Santos, la banda barcelonesa, abunda en las baterías y guitarras que ejercen de colofón, para desmelene de fans en festivales y conciertos. A veces las letras, un tanto crípticas y grandilocuentes, podrían desmerecer el conjunto. Pero nada que no pueda perdonarse después de oír Bichos o La Hermandad.

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2.- Tu forma de hablar a los demás es…
a.- Suave, cálida, aterciopelada, como un koala que se arropase en una mantita de Hello Kitty mientras escucha canciones de Antonio Orozco y desayuna melocotón en almíbar.
b.- Un poco frustrante por culpa del frenillo y otros problemas de dicción. Pero no me quejo.
c.- Directa, seca, autoritaria. Y eso solo si es necesario hablar con los demás. A menudo una coz hace el mismo servicio. (Más…)

FAR CRY: PRIMAL
Ubisoft
PS4

Al contrario de lo que sucede con la saga Call of Duty, con la que hemos pasado de la II Guerra Mundial al futuro cercano, Far Cry viaja atrás en el tiempo. Pero muy atrás. Ríete tú de la Palestina medieval del Assassins Creed. A comienzos del Mesolítico, hace 12.000 años. No ha llovido ni nada. A Jordi Hurtado apenas le habían salido los dientes de leche y los mamuts campaban a sus anchas. Manejaremos a Takkar, el pringado de turnos que se queda aislado de su grupo y debe sobrevivir en un mundo hostil, para acabarse convirtiendo en una mala bestia imbatible. La mecánica del juego es similar a la de ediciones anteriores. Se mantiene ese árbol de habilidades, pero esta vez, por motivos obvios, no contaremos con los resultones lanzagranadas.

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