Gatos de todo el mundo han expresado sus quejas acerca de la creciente dificultad que encuentran a la hora de monetizar sus videos de TikTok. Entre las razones que los felinos achacan a la cada vez más complicada labor de obtener réditos económicos y promocionales de sus videos se encuentran una competencia cada vez más salvaje y los continuos cambios del algoritmo, que han convertido el posicionamiento SEO en un enigma prácticamente imposible de descifrar. Aseguran además que sus sueños de dedicarse profesionalmente a ser TikTokers se desmoronan y temen volver a tener que mendigar comida y caricias de sus dueños, cada vez más desencantados con el rendimiento en redes de sus mascotas.

Pasó su momento

El colectivo de gatos lamenta que antes un único video posando con cara de sueño o jugando con un ovillo de lana era suficiente para alcanzar millones de visualizaciones y cientos de miles de likes mientras que ahora ni siquiera hacer el pino puente sobre braseros ardientes o inmovilizar a un rotteweiler con una llave doble Nelson garantiza destacar entre la ingente cantidad de videos publicados cada día en TikTok. “Parte del problema puede ser la inconsistencia de conceptos como la fidelización en redes o la insensibilización del espectador medio, a quien le resulta cada vez más difícil obtener su dosis de dopamina mirando el móvil y se abandona a un scrolling infinito sin ver durante más de 10 segundos el mismo video”, puntualiza Javi Gotitos, veterinario especializado en social networking.

Los dueños de muchas mascotas están comenzando a plantearse si merece la pena adoptar gatos si luego no va rentar en el medio y largo plazo, para disgusto de varias empresas inmobiliarias afincadas en Andorra.

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