Un estudio elaborado por el Grupo Adecco, realizado a casi 1.800 niños y niñas de entre 4 y 16 años, muestra que este año la profesión de ‘el novio de Ayuso’ se convierte en la más deseada (86,1%), superando a otras más tradicionales como futbolista, astronauta, veterinaria o streamer de videojuegos. Profesores, educadores y pedagogos tratan de explicar la nueva tendencia alegando que los niños infieren que ser ‘el novio de Ayuso’ implica ser un personaje popular, al que, por mucho que haga “cosas malas” o cometa actos reprobables y contrarios a la legalidad, siempre van a apoyar sus amigos, que le defenderán con denuedo en contra de figuras de autoridad, “algo que seduce mucho a los niños, por lo que sea”.

Son el futuro

Un análisis pormenorizado de los resultados revela que la elección de ‘el novio de Ayuso’ como vocación de futuro no obedece a sesgos económicos ni de tendencia ideológica. Así, según datos demoscópicos, los alumnos del elitista colegio San Patricio del barrio de La Moraleja en Alcobendas, Madrid, identifican a ‘el novio de Ayuso’ con un modelo de triunfador, inconformista y librepensador, alabado por sus padres cuando ven los informativos de Antena 3, lo que refuerza y legitima su imagen positiva entre los más pequeños.

Al mismo tiempo, los alumnos que asisten a clase en colegios públicos y que proceden de familias de clase trabajadora de izquierdas también desean mayoritariamente ser ‘el novio de Ayuso’ cuando sean mayores, motivados por los insultos que sus progenitores vierten sobre él cuando aparece mencionado en las noticias, “porque al niño, sobre todo al preadolescente, le gusta todo lo que les toca los cojones a sus padres, dicho esto sin ánimo de contravenir el lenguaje inclusivo”, aclara Pilar Ingóloga, psicóloga infantil.

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