diciembre 19, 2012

Intocable

Tras muchos meses de no ver a su demacrado yerno, Juan Carlos de Borbón, convaleciente de su enésima puesta a punto, le recibía en un hospital privado de Madrid.

«Nos advirtieron de que venía alguien muy importante y de que no perdiéramos de vista nuestras pertenencias de valor”, susurra una empleada de la clínica mientras denuncia la sustracción de un paquete de clinex, 20 euros en monedas y medio sandwich mixto. Los duques de Palma entraban acompañados de la Reina y el hijo mayor de la pareja, Juan Valentín. La visita de Sofía de Grecia, era esperada a la puerta del taller por la nube de periodistas. “Olía a laca desde media hora antes, nos prohibieron fumar”, afirma un paparazzi. Inesperada por contra fue la de los copropietarios al 50% de la sociedad Aizoon S.L. Empresa empleada para vaciar a golpe de factura el Instituto Nóos, a su vez utilizado para sablear millones de euros mediante informes copy-paste y power points de parvulario a quienes se pusieran al alcance de Iñaki Urdangarin y su socio Diego Torres (ver EL KARMA 140).  “Está todo el croquis de cruce de facturas en una servilleta. Cuando acabe el juicio pujaremos por ella”, comenta Juan Palomo, promotor del Museo del Timo, que se ubicará en el velódromo Palma Arena. El croquis, cuya autoría intelectual se atribuye al cuñado de Diego Torres, Marco Antonio Tejeiro, estará junto a “la Constitución de 1978 y el código ético de la banca para evitar desahucios”, según Palomo. Le preocupa que el papel “contenga restos de las babas de Iñaki Urdangarin o su señora. Elevaría su precio a límites estratosféricos”.
A lo largo del año se han simultaneado las revelaciones sobre el caso y la ejecución del sumario, con su momento estelar el día 25 de febrero de 2012. Iñaki Urdangarin acudía a la Audiencia Provincial de Palma a dar cuenta de sus problemas de amnesia. “No sé”; “no lo recuerdo”; “mí no conprenda”; “quizá no tuve una infancia feliz”; “a qué hora se come aquí”… eran sus respuestas hasta el extremo de que el juez Castro le espetó que para “decir esto es mejor que no hubiera venido”. “No seamos injustos con el Duque, también echó la culpa de todo a su ex-socio, mi cliente. Una persona honrada a carta cabal que guarda e-mails que pueden hundir la monarquía”, apunta el abogado de Diego Torres, Manuel González Peeters. Días más tarde saltaba la noticia en el diario El País: en 2004 la Caixa había otorgado a Iñaki Urdangarin y Cristina de Borbón 5,8 millones de euros de hipoteca para adquirir una torre de lujo en Pedralbes, la zona más cara de Barcelona. “¿Mandee? 3.000 euros brutos de salario al mes, a 30 años vista al euribor más 0,5% revisable. Sí, es nuestra. Lo normal aquellos años de cemento y rosas para una pareja de clase media baja con cuatro hijos problemáticos y toda la vida por delante”, corrobora Isidre Fainé, director general de la entidad entonces y actual presidente de Caixabank, mientras se zampa un bocadillo de clavos.

Fue sin queriendo

A la compra de ese inmueble achaca hoy Urdangarin su caída a los infiernos de la consultoría falsa y la mordida. Según él, fue el Rey el que le animó a sacar a su hija de un cuchitril de 300 metros. La infanta Cristina, consorte con suerte, se ha librado del trago de declarar en el juzgado al estimar la fiscalía que “la gestión de la sociedad (Aizoon SL) está en manos de su cónyuge”. Se aclaraba así el dilema que quitaba el sueño a la opinión pública: ¿Esta es tonta o está en el ajo? “Al optar la fiscalía por colocar a Cristina de Bobón en el papel de inocente esposa se ejecutaba un cortafuegos para poner a salvo a la Corona”, afirma el ornitólogo Piero Grullo. “Aparecen en la trama pájaros que siempre han puesto sus huevos cerca de palacio”, constata. Se refiere al ex-regatista José Luis Pepote Ballester o el secretario personal de las infantas Carlos García Revenga. Jarraime Peñafiel, monárquico a muerte, cree que dar un premio Príncipe de Asturias a la Federación española de Bancos de Alimentos no es suficiente para “remontar en las encuestas”. Tampoco se lo parece la intervención sobre voluntariado y altruismo de una “desanillada” Letizia Ortiz en el BEC de Barakaldo, llamando a “ser solidarios en esta época de dificultad y crisis tan feroz”. Cree sin embargo que “la mala racha pasará porque los problemas actuales se pueden contar con los dedos de una mano”. A saber: malversación, prevaricación, falsedad, fraude y blanqueo de capitales.

Para todo lo demás:
www.casareal.es
Borbón y cuenta nueva
www.belize.gov.bz
Exteriores de lujo
www.divorcioexpress.es
Nunca se sabe

Abel de las Heras © humorenlared.com

 

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