Bailar es la celebración de la vida. Es la expresión de nosotros mismos y nuestra alegría. Un pilar fundamental en todas las culturas. El baile en pareja es una forma de comunicación a través del movimiento corporal. Hay estudios que reflejan la correlación entre determinados movimientos y rasgos de personalidad. Los extrovertidos tienden a bailar de manera más enérgica, expresiva y entusiasta. Mientras que las personas cordiales prefieren la armonía en los movimientos, la sintonía y la cooperación con el otro. Cuando alguien disfruta bailando con todo su cuerpo en un espacio reducido es muy probable que esté abierto a experimentar. Que sea creativo y original.

Hay una teoría que afirma que las mujeres incitan a los hombres a bailar para aprender más sobre ellos. La persona que baila bien goza de buena salud, tiene fuerza, y es capaz de reaccionar rápido al movimiento. Lo que parece indicar que sería capaz de luchar, y por lo tanto de proteger a su familia. Por eso en muchas comunidades tribales los hombres utilizan el baile para atraer a las mujeres. Pero a pesar de la descendencia y la supervivencia, y simplemente por compartir la alegría: ¿Bailamos?

Sheila Blázquez © elkarma.eus