Se comenta estos días la división cainita que vive Podemos y la incapacidad de la izquierda para construir de forma solvente agrupaciones diversas y respetuosas de la discrepancia. Errejón es un ejemplo, pero no el único, porque no hay más que mirar hacia Navarra, Galicia o Cataluña para darse cuenta de que los buenos deseos chocan en demasiadas ocasiones con el personalismo, los sectarismos y los criterios inamovibles. En este sentido el ejercicio del asamblearismo, cuando no se cree firmemente en él o no se está educado en sus fórmulas, es claramente caótico. (Más…)

En la misma noche electoral marcada por el éxito de Vox y el retroceso histórico del PSOE no sé qué sorprendía más. Si la exultante celebración ultra sin una sola bandera de Andalucía entre su auditorio o el vacío absoluto en la sede de la derrotada candidata socialista. (Más…)

Es necesario reflexionar sobre los éxitos electorales que personajes tan peligrosos como Trump, Salvini, Orban, Duterte, o finalmente Bolsonaro están logrando en diferentes partes del planeta.
La crisis ha extraído lo peor del cuerpo social, en busca de soluciones primarias, simples y egoístas, cuando no directamente criminales. Es obvio también que las políticas de los partidos de orden, supeditadas en muchas ocasiones a comportamientos corruptos, y que aplicaban, tanto por la derecha como por la izquierda, políticas similares impuestas por poderes fácticos atentos únicamente a sus beneficios escandalosos, han terminado por debilitar el orden existente hasta el momento. (Más…)